Niños Abandonados

 

Este post es bastante triste pero lamentablemente real, y es que existen niños abandonados por sus padres aún conviviendo juntos en la misma unidad familiar.

Se abandona a un niño cuando reclama tu atención y le contestas sin siquiera dignarte a mirarlo.

Cuando te muestra su dibujo y le respondes “qué bonito” mientras te vas a otra cosa sin darle la menor oportunidad de describirtelo.

Cuando te coge ilusionado de la mano para llevarte al lugar donde quiere mostrarte algo y te sueltas diciéndole que ahora no puedes.

Cuando después de toda la semana laboral sin estar con él, desapareces el fin de semana para ir de cacería, a montar en bicicleta, al bar a ver fútbol, …

Cuando vuelves del trabajo y no lo buscas ni preguntas por él.

Cuando se le mira pero no se le ve.

Se abandona a un niño cuando lo engañamos frecuentemente con promesas baratas que no pensamos cumplir.

Cuando no se le educa desde la calma, obligándolo a vivir constantemente dentro de su propia trinchera.

Cuando lo castigas delante de todos y te ríes de su humillación.

Cuando lo usas como arma arrojadiza contra tu pareja en discusiones.

Cuando le exiges la madurez de un adulto para no tener que molestarte en comprenderlo como niño.

Cuando no lo abrazas, no lo besas, no lo "achuchas" o no juegas con él a hacerle cosquillas.

Cuando tu tiempo libre, es siempre tu tiempo sin él.

Se abandona a un niño cuando, sabiendo que te necesita, no te levantas (de la cama a las cuatro de la mañana, del sofá en la sobremesa, de la silla del bar que da a la plaza donde ellos juegan, de la hamaca de la playa,... del sillón relax).

Se abandona a un niño cuando, sin tener aún edad, se le regala un móvil con su propio cargador.

Cuando la calle se convierte en su hogar y su hogar deja de ser su casa.

Se abandona a un niño cuando no se entiende que él no ha venido al mundo a robarte tu tiempo, sino que lo trajiste tú para entregarle tu vida incondicionalmente.

Nuestros hijos notan si no nos apetece estar con ellos y un niño no debería nunca hallarse desamparado.

Por favor no olvidemos que el mayor miedo que tienen los niños, es sentirse abandonados por sus padres. No hay nada peor para ellos; ese es su temor fundamental.