CONSEJO III
(Hay una edad en la que para nuestros hijos somos omniscientes, conocemos todas las respuestas, así que nos dedicamos a decirles qué y cómo tienen que actuar.
Van creciendo y descubren, o descubrimos, que no es cierto, así que dejamos de DECIRLES qué hacer para ACONSEJARLES lo que podrían hacer).
CONSEJO III. TU CREDIBILIDAD.
Esta tarde, después de almorzar, cuando estaba lavando los platos y los niños jugaban a hacer aviones de papel, Eiden entró en la cocina sobresaltado:
“¡no te lo vas a creer papá, he lanzado el avión y se ha clavado justo entre las agujas del reloj del salón!”. “¡De verdad papá, en serio, ven a verlo!”.
A lo que respondí con el mismo nivel de impresión:
“¡Guauu, con lo difícil que es hacer eso!” Pero no me falta pasar a comprobarlo; solo con que tú lo digas ya sé que es verdad.
****************
Sé siempre franco, mi vida, cuenta siempre la verdad. Aprende a reconocer tus errores, a sabiendas de que todos nos equivocamos cada día, y siéntete orgulloso cada vez que te disculpes porque hasta en los desastres más monumentales hay maneras correctas de actuar.
Existen mentiras sin sentido, mentiras cobardes, mentiras hipócritas o traicioneras. No pierdas nunca tu credibilidad por mentiras absurdas que no te llevan a ninguna parte.
Sé fiel a tus principios y te ganaras tu palabra, y así, si lo afirmas, yo pondré mi mano en el fuego por lo que dices, y no porque seas mi hijo: te defenderé a muerte solo porque lo has dicho tú.
Comentarios
Publicar un comentario